Viaje a Tíbet: Qué ver y hacer en Tíbet

Sin duda alguna, quien habla de Tíbet, habla de su incomparable belleza a más de 3000 metros de altitud, de sus monasterios y sus monjes. A continuación Soiono Viajes, recomienda qué ver y hacer en un viaje a Tíbet.

Lhasa

La capital tibetana, se encuentra situada a 3700 metros de altitud. Entre las maravillas que esconde Lhasa, es imposible perderse las visitas al Templo de Potala, que permanece casi en las mismas condiciones que en el siglo XIV, la calle Barkhor, con su famoso mercado y el parque Norbulingka, el cual posee el atractivo del palacio en el que pasaron los veranos los antiguos Dalai Lamas así como el maravillosos parque que lo rodea. Estas tres maravillas, son conocidas como los “tres grandes templos”. El Templo de Potala, en la actualidad sirve únicamente de museo, pudiéndose observar su amplia oferta artística en lo que a pinturas y objetos antiguos se refiere, así como sus distintas salas de preciosa arquitectura.
 

El Templo geométrico Jokhang, se considera espiritual del Tíbet y “catedral de Lhasa”, donde se pueden ver a los monjes tibetanos rezar, lo cual da una idea de la paz y el misticismo que ahí se concentra.

Otros lugares imprescindibles en Lhasa son: El Monasterio de Drepung, uno de los más grandes que existen en el Tíbet, el Monasterio de Sera, lugar en el que vivian los monjes estudiantes más avanzados y el Mercado de Barkhor, un lugar pintoresco en la que se puede comprar artículos budistas y diferentes recuerdos del viaje al Tíbet.

Tsedang
Esta hermosa ciudad, posee los monasterios Yumbulakhang y Thandruk. El Palacio de Yumbulakhang, es el edificio de mayor antigüedad del Tíbet y se encuentra situado en lo alto de una montaña.  Esta altura, permite apreciar las vistas que ofrece el valle del Yarlung.
 

 

Según la leyenda, se trata del primer edificio construido en el Tíbet, así como el palacio Nyati Tsenpo, primer rey tibetano, quien descendió del cielo. El Monasterio Thandruk es uno de los conventos budistas de mayor antigüedad del Tibet, así mismo también tiene la función de lugar de peregrinaje.

 

Gyantse
Antes de llegar a Gyantse, es preciso detenerse en el camino para apreciar el lago Yamdrok, que con sus aguas turquesas y las vistas del monte Kangstang permite llevarse unas fantásticas fotografías. En Gyantse, se encuentra el Monasterio de Pelkhor Chode, que se caracteriza por ser un recinto amurallado con diversos monasterios dentro, que pese a encontrarse la gran mayoría destruidos por la revolución cultural, aún se pueden visitar los demás. Este monasterio alberga la famosa estupa “de las Diez mil imágenes”.

 

 

Xigatse
Una de las peculiaridades de esta ciudad es su ubicación, ya que se sitúa cerca del Everest, del Monasterio de Sakya y en el único camino que existe a los lagos sagrados del Tíbet. El mayor punto de interés de Xigatse es el Monasterio Tashilhunpo, residencia habitual del Panchen Lama. Se trata de un lugar de veneración para los tibetanos.
 

 

En su interior resalta la capilla Maitreya, por la construcción de la estatua de Maitreya en oro y piedras preciosas. A lo largo del año, se realizan diversos festivales en honor a Buda, dando la oportunidad a los presentes de admirar los retratos de los tres Budas.